Después de perder su empleo y acabar con su relación problemática, Olive (Crew) opta por dejar la ciudad en busca de unos días de paz en el campo. Para ello, alquila una casa rural algo peculiar y muy decorada, perteneciente a un hombre que se presenta como Harvey (Patrick), un viudo que intenta disimular a toda costa sus inclinaciones psicopáticas.