Con la asistencia del "Dragón Sin de la Ira", Meliodas y los más notorios rebeldes de todos los tiempos, los Siete Pecados Capitales, la "Guerra Santa", en la que cuatro razas —Humanos, Diosas, Hadas y Gigantes— se enfrentaron a los Demonios, finalmente concluyó. A un alto costo, la vida de Escanor, "El pecado del orgullo del león", fue sacrificada para derrotar al Rey Demonio, restaurando así la paz en el mundo. Posteriormente, cada uno de los pecados emprendió su propio camino.