A comienzos del siglo XVII, la joven Perséfone es injustamente acusada y llevada ante un tribunal. Su condena a muerte parece estar decidida, pero en el instante crucial, aparece la Reverenda Madre, cabeza de un pequeño convento religioso, un Priorato remoto donde sus hermanas consagran sus vidas al Señor y buscan redención por sus pecados pasados. Sin embargo, al llegar, Perséfone empieza a experimentar visiones aterradoras y pronto se percata de que lo que le aguarda no es la salvación, sino una lucha por el control de su propia alma.