El investigador Bruce Robertson (James McAvoy) es el oficial de policía más grosero, depravado, misántropo y adicto a las drogas y al sexo en Edimburgo. A pesar de sus defectos, Robertson aspira a un ascenso. Sin duda, es el candidato ideal para el puesto; sus compañeros son unos incompetentes. Sin embargo, ha ocurrido un asesinato y el superior de Bruce exige resultados. No hay inconvenientes. Él está al frente y, cuando logre resolver el caso y obtenga el ascenso, su esposa regresará a su lado.