Guzmán se desempeña en un parque nacional junto a un reducido pero leal grupo de guardaparques, siempre vigilantes ante la presencia de un animal salvaje que acecha desde la jungla. Sara, su esposa, es una médica comprometida con la comunidad circundante. Entre ellos está un amigo de la infancia de ambos, quien también fue expareja de Sara. Los celos, los asuntos pendientes y las dinámicas de poder pondrán a prueba la relación entre los tres, conduciéndolos hacia un desenlace implacable.