En una escuela, al inicio del año escolar, se encuentran dos niñas chinas de 9 años. Todos suponen que se harán amigas, pero no tienen nada en común. Lucía es de segunda generación de inmigrantes. Se siente completamente española y solo desea integrarse con sus compañeras del colegio. Anhela tener unos padres "normales" como los de sus amigas, ya que los suyos la avergüenzan constantemente por no hablar español, trabajar más de 14 horas en el bazar y no permitirle celebrar su cumpleaños en el Burger King. La otra niña, Xiang, es adoptada y su rostro revela que no es hija biológica de sus padres. Xiang se cuestiona sobre su familia biológica; no se siente china ni se siente aceptada por los demás niños en la escuela. A lo largo de su camino, las dos niñas se cruzarán, se separarán y, finalmente, se volverán esenciales la una para la otra en su búsqueda de identidad.
