Carlo y Giulia forman un matrimonio con tres niños. Carlo está completamente enfocado en su empleo, lo que le ha llevado a descuidar su papel como padre. Por el contrario, Giulia ha dejado de lado su carrera profesional para dedicarse por completo al cuidado de su hogar. La tarea es tan exigente que decide tomarse diez días de descanso. Su esposo deberá asumir la responsabilidad, lo cual resultará complicado para un Carlo que se verá envuelto en discusiones, caos por todas partes y situaciones que rozan la tragedia.